jueves, 21 de mayo de 2009

¿Qué son los aditivos alimentarios?

En la primera mitad del siglo XX se desarrolló enormemente el empleo en los alimentos de lo que en un principio denominó “sustancias extrañas a la composición de los alimentos”. A ello contribuyó el considerable incremento de la población, el cambio de las cambios de las condiciones sociales, la evolución de las Industrias bromatológicos y el transporte, necesitando métodos de conservación adecuados y normas estrictas de elaboración, almacenamiento y distribución.
Además del cambio de las condiciones sociales, el nivel de vida, el tipo de que se dispone para la comida diaria y las distancias para acudir al trabajo hay que añadirle trabajo de ama de casa fuera del hogar; la necesidad de los comedores colectivos en empresas y colegios, en una palabra la comida fuera del hogar sobre todo en los colectivos industriales.
No ha sido la moderna industria alimentaria la que tuvo la iniciativa de “inventar” los aditivos. Por el contrario, su empleo se remonta a los tiempo en que en la alimentación tradicional se empleaba la sal y posteriormente, en el Imperio Romano, la salmuera. Ciertos pueblos utilizaron algas, líquenes y gelatina para dar cierta consistencia a los alimentos. En el pasado se utilizaron extractos vegetales como aditivos colorantes.

El problema de dichas “sustancias extrañas” tomó tal envergadura que empezó a estudiarse la posibilidad de utilizar diversas de ellas con diversos fines, que ya citaremos más adelante, con dos principales propósitos: mejorar la calidad de los alimentos y la protección del consumidor. Para éste último propósito has que tener en cuenta problemas sanitarios que delimitan cuáles son las sustancias que pueden admitirse como aditivos alimentarios.

En las diversas Reuniones Internacionales a este respecto se acordó estudiar la posibilidad de substituir estas “sustancias extrañas” por otras sustancias naturales que puedan incluso formar parte de la composición de los alimentos. Fue entonces cuando se les cambió el nombre de “sustancias extrañas” por el de “aditivos químicos de los alimentos”
Aunque hace muchos años se fueron estudiando estos productos fue a mediados de siglo cuando se establecieron internacionalmente las bases para el uso de estas sustancias.

Se celebraron diversos Congresos, Reuniones y Symposios en los que intervinieron tres importantes sectores: Industriales (fabricantes y comerciantes de alimentos), Científicos (bromatólogos, nutrólogos, toxicólogos, etc.) y legisladores (representantes de los Departamentos ministeriales).

Intervinieron diversos Organismos: Comisión Internacional de Industrias Agrícolas, Unión Internacional contra el cáncer, Eurotox, FAO, OMS, Sociedad Española de Bromatología, etc.

De los estudios y deliberaciones mantenidas, se sentaron los principios fundamentales del uso y comercialización de los aditivos químicos que han servido como bases fundamentales para establecer legislaciones nacionales e internacionales correspondientes.

Todos los productos que puedan encontrarse en los alimentos, ajenos a su composición natural, se clasifican en:

Sustancias enriquecedoras del valor nutritivo
Productos ocasionales
Aditivos químicos
Coadyuvantes tecnológicos


Fuente: Aditivos Alimentarios, 1986. Prof. Dr. León Villanúa. Catedrático de Bromatología, Facultad de Farmacia. Universidad Complutense. Madrid.

No hay comentarios:

Publicar un comentario